El coronavirus, bautizado por la OMS como Covid-19, no parece afectar a la seguridad alimentaria así que no hace falta tomar precauciones especiales con los alimentos. La EFSA no ha iniciado, por el momento, ninguna acción en respuesta al actual brote. Por su parte, el ECDC ha publicado una guía provisional para la limpieza ambiental en instalaciones no sanitarias expuestas al Covid-19.

Estos días estamos oyendo hablar y alabar el trabajo de los profesionales sanitarios en los hospitales; memes, fotos de agradecimiento, canciones desde los balcones, aplausos generalizados… por supuesto, se lo merecen y mucho. Pero, una vez más, nadie se está acordando que dentro de esos mismos centros trabaja un colectivo profesional (cocineros/as, técnicos, personal de operaciones, dietistas-nutricionistas, compras, logística, calidad, limpieza…) que está alimentando a los enfermos y al personal sanitario, con la profesionalidad de siempre, a pesar de las complicaciones y riesgos añadidos por la pandemia.

Que la crisis del coronavirus representa un reto sanitario y económico de primer nivel es algo que ya nadie duda. Al problema sanitario se le une una reacción en cadena derivada del cierre de centros y anulación de actividades que afecta de lleno a las empresas de colectividades. Desde la patronal Food Service España destacan la alineación del sector con las administraciones para el control de la epidemia y una intensificación de los esfuerzos para gestionar los impactos derivados de esta situación.