Martes, 05 de noviembre 2013
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha celebrado entre el 4 y 10 de noviembre, la ‘Semana de la reducción de desperdicios’ bajo el lema ‘Buen aprovecho. Reduce el desperdicio de alimentos’, con actividades dirigidas a los escolares para que aprendan la importancia del aprovechamiento de los alimentos.
Durante la semana del 4 al 10 de noviembre, el ministerio ha organizado diversas acciones de información y promoción entre las que se encuentra la distribución de materiales didácticos a colegios, con el fin de concienciar sobre la importancia del aprovechamiento de alimentos y la reducción de desperdicios alimentarios.
En este sentido, se han distribuido pósters en los centros escolares en el ámbito nacional, que contienen un decálogo con recomendaciones básicas sobre el aprovechamiento de alimentos dirigidos tanto a profesores como a alumnos.
Además, se han creado una serie de cápsulas de video breves sobre consejos para un mejor aprovechamiento y conservación de los productos alimentarios.
‘Semana de la reducción de desperdicios’
La ‘Semana de la Reducción de Desperdicios’ responde a la estrategia ‘Más alimento, menos desperdicio’, desarrollada por el departamento desde el pasado mes de abril y que tiene como objetivo limitar las pérdidas y el desperdicio de alimentos (descargar documento).
Con este objetivo se han organizado diferentes actividades de información y promoción entre el 4 y el 10 de noviembre dirigidas a profesionales de la restauración, escuelas de hostelería, consumidores y escolares.
En la presentación institucional de la campaña, el ministro Arias Cañete destacó que la estrategia está destinada a “fomentar la transparencia, el diálogo y la coordinación entre los agentes de
la cadena alimentaria y las administraciones públicas, y a desarrollar de forma coordinada, actuaciones que contribuyan a impulsar un cambio de actitudes, sistemas de trabajo y de gestión que permita limitar el desperdicio y reducir las presiones ambientales”.
Para lograr la meta propuesta, el ministro anunció la puesta en marcha de cinco grandes áreas de actuación, definidas junto con el sector, que se centrarían en los ámbitos del conocimiento del problema, el establecimiento de buenas prácticas, su difusión y promoción, los aspectos normativos que pueden afectarle, la colaboración con otros agentes, y el fomento y desarrollo de nuevas tecnologías que ayuden a minimizar el problema.
1.300 millones de toneladas desperdiciadas al año
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, para el año 2050 la producción mundial de alimentos deberá incrementarse en un 70 por ciento para abastecer el aumento previsto de la población de 7.000 a 9.000 millones de habitantes. No obstante, la Comisión Europea estima que cada año se desaprovechan más de 1.300 millones de toneladas de alimentos, es decir, 1/3 de la producción mundial, de los que 89 millones de toneladas de comida en buen estado se despilfarran
cada año en la Unión Europea y ocho millones en España.
Las pérdidas y el desperdicio de alimentos pueden producirse en todos los eslabones de la cadena alimentaria: en el campo, en las industrias de transformación, en la fase de distribución, en los comedores escolares, en restaurantes y en las casas de los propios consumidores.
Las causas no son siempre las mismas, y varían según el tipo de producto, según la producción, el almacenamiento, el transporte, el envasado y, por último, los malos hábitos o la falta de concienciación de los consumidores.
Además del problema ético y nutricional que supone que una cantidad considerable de alimentos en buen estado se desaproveche cada día, se plantea el impacto ambiental, en términos de cantidad de recursos naturales finitos, como los recursos hídricos, la tierra o los recursos marinos utilizados para la producción de estos alimentos no consumidos. Asi mismo el vertido de residuos biodegradables, entre los que se encontrarían los alimentos no aprovechados contribuyen al cambio climático.